«Y como ha dejado su niñez, (…) se olvida que para llegar al cielo se necesitan, como ingredientes, una piedrita y la punta de un zapato.» Julio Cortázar La campana
La campana es uno de los juegos más conocidos del mundo, ya se conocía en la Grecia clásica con el nombre de ascolias y en la Roma imperial con el juego de los odres. Arcaico y universal, el juego de la rayuela constituye, como muchos otros juegos, un pequeño enigma etnológico para los estudiosos, que aún no se han puesto de acuerdo sobre sus orígenes y le han atribuido, como los naipes, significados míticos, mágicos, religiosos, cabalísticos, etc. , relacionándolo con el progreso del alma, con ceremonias y ritos de paso, con el laberinto y la espiral, etc.
Según una de las versiones conocidas, la campana fue inventada por un monje español, que quiso simbolizar en este juego el comienzo de la vida, la vida misma, con sus dificultades y alternativas, y la muerte, en la antesala a la que aparecen el infierno y el purgatorio. , etapas previas del cielo, el objetivo final. Rayuela se llama de manera diferente en algunos países.
En España también se le llama tejo, y también recibe otros muchos nombres como calderón, cox cox, futi, traquenele, telazarranea, reina mora, pata coja, infernaculo, pitajuela, mariola, etc. En Chile se le llama luche o huche; en Colombia glotona o carroza; en Portugal juego del diablo o juego de los muertos; en Italia se llama el mundo; en Venezuela el juego del Viejo; en México avión o bebida.
Así describe el juego Julio Cortázar en su novela Rayuela, publicada en 1963: «La rayuela se juega con una piedrita que hay que empujar con la punta del zapato. Ingredientes: una acera, un guijarro, un zapato y un bonito dibujo a la tiza, mejor si es de color. Arriba está el Cielo, abajo está la Tierra, es muy difícil llegar al Cielo con un guijarro, casi siempre se calcula mal y la piedra se sale del dibujo. Poco a poco, sin embargo, se va adquiriendo la habilidad necesaria para salvar los diferentes cuadrados (campana caracol, campana rectangular, campana fantasía, poco usada) y un día aprenden a dejar la Tierra y escalar el guijarro hacia el Cielo, hasta entrar en el Paraíso. Existen numerosas variaciones de este juego en el mundo, pero todas tienen algo en común. Una de las formas más sencillas y comunes de jugarlo es la siguiente: En un espacio de aproximadamente 75 centímetros por 150 centímetros, se dividen seis superficies iguales. y numerados del 1 al 6.
Rayuela según cada país
La rayuela o sambori es un juego conocido en casi todo el mundo, especialmente en Europa y América Latina. Sin embargo, su nombre cambia según al lugar. Por ejemplo, en algunas regiones de España se le conoce como “Guiso”, “Pata coja”, “Reina Mora” y muchos otros.
En México, al mismo juego se le conoce como “El avioncito”. En Venezuela se le llama “Pisé”. En países como Argentina, Ecuador, Costa Rica, Panamá, Honduras y Nicaragua, generalmente es simplemente “campana”.